Claude Makelele regresó ayer por la tarde a la Ciudad Deportiva para reintegrarse a los entrenamientos del Real Madrid después de desertar durante nueve días. Ha estado convocado para ocho sesiones de trabajo a las que no acudió y ayer, por fin, hizo acto de aparición en las instalaciones de trabajo madridistas. Sus planes, sin embargo, no han variado. El jugador francés comunicó ayer al entrenador, Carlos Queiroz, y al capitán del Madrid, Raúl, que no contaran con él para el proyecto que se pone en marcha. El deseo de Makelele sigue siendo el de no vestir más la camiseta del conjunto blanco y así se lo dijo a los máximos representantes del equipo. El medio francés, incluso, propuso a Raúl cambiar de vestuario para no crear problemas. La respuesta del delantero fue negativa. Para él seguirá siendo uno más.

Por otra parte, el agente de Claude Makelele, Marc Roger, está en Palma de Mallorca tratando de tener un encuentro con el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez. El club madridista se cerró en banda a una negociación en cuanto el jugador se negó a entrenarse por primera vez. Y la postura de la entidad blanca también sigue siendo la original. Ha limitado el asunto a la parcela jurídica, según fuentes oficiales, y sólo si Makelele toma otras iniciativas ‘ilegales’ para forzar su salida en busca de un contrato que duplicaría su ficha actual, el Madrid emprendería nuevas acciones. En caso contrario, el club sólo se ocupará de sancionarle por su incomparencia la semana pasada a los entrenamientos.

El castigo, no obstante, sólo será económico, nunca deportivo a tenor de la acogida que tuvo ayer Makelele en el campo 2 de la Ciudad Deportiva. Sus compañeros, además, de bromear con el centrocampista galo -“ЎA pagar la multa por no trabajar, a pagar!”- le arroparon en todo momento y el entrenador, Carlos Queiroz, se encargó personalmente de iniciar la puesta a punto de Makelele para que alcance el nivel del resto. Salió del vestuario aún en pleno diálogo con el técnico portugués, quien estuvo pendiente del francés en todo momento. El jugador pretendido por el Chelsea tuvo el mismo trato que Roberto Carlos, ausente de algunas sesiones por motivos personales, y Pavón, ‘tocado’ desde su intervención con la selección en Las Rozas.