Al Madrid le hacía falta un revulsivo para salir
del bache (derrotas ante el Zaragoza en la final de Copa y ante el Athletic
Bilbao en San Mamès). Ese revulsivo ha llegado y no ha sido otro que Ronaldo. La
prensa española en general destaca la actuación del brasileño, autor del cuarto
gol y de la jugada del penalty que dio lugar al tercer tanto madridista ante el
Mónaco. Ronie creó y tuvo en sus botas más ocasiones a lo largo del partido,
hasta que fue sustituído por Solari en el minuto 82.