La renovación de Roberto
Carlos sigue en punto muerto. Hasta que no termine la
temporada no se van a volver a reanudar las conversaciones.
La novedad en las futuras negociaciones puede estar en que
el jugador deje todo en manos de un representante.
Roberto Carlos no tenía un
intermediario oficial. Hay que recordar que se desvinculó de
Oliveira Junior, el que fue su agente durante muchos años y
el hombre que hizo la operación para que recalase en el
Inter y luego en el Real Madrid. Roberto Carlos ha estado
dos años sin querer tener representante y los contratos los
llevaba de forma personal con el asesoramiento de unos
abogados. Ahora puede volver a poner su futuro en manos de
un agente, que sería el que se sentaría a negociar con el
club blanco.
Las intenciones del Real
Madrid pasan por ofrecerle un contrato de dos años más,
hasta 2007, pero el jugador ha expresado su intención de
querer un contrato más largo. El Chelsea se mantiene a la
espera.