Los intentos de Joan Laporta por mejorar el
contrato de Ronaldinho para poder subir un 50 por ciento su cláusula de
rescisión se quedarán en eso, en un intento. El presidente del Barcelona
llegó ayer a Brasil con una oferta de mejora consistente en mantener la
base salarial en 3,5 millones de euros, una subida sustancial de los
incentivos por objetivos -partidos jugados, goles, títulos, etcétera- y,
a cambio, un aumento de la cláusula de rescisión de 100 a 150 millones
de euros. Laporta supo enseguida por Roberto de Assis, hermano y
representante del jugador, que la propuesta no era de recibo. Bastó una
conversación telefónica entre ambos.Ronaldinho protagoniza un
culebrón desde que Laporta dijo, el pasado abril, que sería difícil para
el Barça retenerlo si le llegaban ofertas de jeques árabes o magnates
del petróleo. El presidente sabía ya de los movimientos del ruso Roman
Abramovich, propietario del Chelsea inglés, para tentar al brasileño.
Abramovich posee el poder financiero suficiente no sólo para pagar los
100 millones de la cláusula de rescisión, sino que además le ha hecho
llegar una oferta a Ronaldinho consistente en nueve millones de euros
netos por temporada. Eso es casi el triple de lo que el centrocampista
gana en el Barça.
Un año más. La alarma en torno a Ronaldinho seguirá activada
esta temporada. La negativa del crack a firmar el nuevo contrato no
supondrá que vaya a abandonar el Camp Nou este verano. Ronaldinho está
entusiasmado con los planes del club para reforzar el equipo en su
regreso a la Champions League, se sabe figura indiscutible de la afición
y mimado por los medios de comunicación, por lo que se plantea su
segunda temporada como un reto personal. Sin embargo, podría ser que el
próximo verano el asunto se replanteara y que el Barça, en función de
cómo le resulte el balance de su segunda temporada bajo la gestión de
Laporta, esté dispuesto a vender a su crack mediático.
Un equipo hecho a la medida del crack
En la entrevista a Julio Baptista que acompaña esta página, el
jugador brasileño del Sevilla deja claro cuánto pesa Ronaldinho en el
Barcelona de Laporta, Begiristain y Rijkaard. Dice Baptista que su
paisano le ha pedido a la directiva que lo fichen. No es un asunto
baladí. Ronaldinho quiere un equipo hecho a su medida, para que su
segunda temporada en blaugrana sea la de su consagración definitiva en
Europa, con un título de los que pesan. Las gestiones para incorporar a
dos jugadores brasileños (Baptista y el delantero Luis Fabiano, del Sao
Paulo) no hacen más que responder a los deseos del crack mediático. Tras
el periodo holandés, el Barça parece empeñado en iniciar otro con acento
brasileño. Satisfacer las peticiones de Ronaldinho hará posible que el
jugador se quede otro año en el club, perdiendo dinero.
Gabri lo considera “un pilar”
“Ronaldinho es el jugador del cambio, el pilar del equipo y el que,
con su presencia, trajo un nuevo aire”. Gabri García se sumó ayer a la
larga lista de compañeros de Ronaldinho que llenan de elogios al
brasileño. Antes lo habían hecho jugadores con mayor o menor peso en el
Barça, pero todos unidos por su voluntad de piropear a quien consideran
un futbolista clave para la próxima temporada. Gabri no se toma en serio
la amenaza de que Ronaldinho pueda acabar en el Real Madrid de la mano
de Lorenzo Sanz: “No hay temor a que ocurra, porque el Barça ya tendrá
la lección aprendida y hará el máximo esfuerzo para conseguir que se
encuentre a gusto”. El jugador, desde la concentración de la Selección
en Las Rozas, se mostró optimista con respecto a la campaña 2004-05 del
Barça: “Tras cinco años sin conseguir títulos, nos gustaría poder
celebrarlo la próxima temporada con un equipo competitivo”.