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Y es que la pasión que se
vive en Alicante cada que el Real Madrid rinde visita, se desborda.
Tanto en el Aeropuerto, como en el Hotel Hesperia Alicante Golf Spa, los
jugadores fueron aclamados por los cientos de aficionados que se
congregaron en los diferentes puntos. Estamos en agosto, y cientos de
madrileños disfrutan de su período vacacional en el litoral levantino,
San Juan, El Campello y la propia capital, reciben cada verano la visita
de muchos aficionados madridistas. Esta situación provocó que los
Beckham, Raúl o Zidane vivieran auténticas avalanchas humanas para
conseguir un autógrafo, un apretón de manos, aunque fuera un tesoro
complicado de lograr. Emilio Butragueño y Luis Gómez Montejano
encabezaron la expedición.
En contra de la norma, el Real Madrid abandonó la capital de España el
mismo día del encuentro. La decisión estuvo provocada por el elevado
número de días que la plantilla ha estado lejos de sus casas. Eso sí, a
primera hora, los jugadores y cuerpo técnico estaban citados en el
Santiago Bernabéu. Allí, trasladó al Aeropuerto de Barajas, donde, a las
once de la mañana, medio centenar de aficionados les despidieron.
El vuelo de Iberia, operado por la compañía Air-Nostrum YW 5277,
trasladó al Real Madrid hasta Alicante. En verano, los desplazamientos
suelen caracterizarse por la tranquilidad, pero el tramo final del vuelo
fue movidito. Las nubes de evolución que cubrían el cielo alicantino,
provocaron que el descenso se complicara. El aperitivo servido con
anterioridad, compuesto por hojaldres de chorizo, atún y jamón, y
canapés de tortilla, pimientos y sobrasada, se indigestaran en algunos
estómagos. Al final, las turbulencias no pasaron a mayores y el reactor
aterrizó sin problemas a las 12:30 horas, tras cuarenta y cinco minutos
en el aire.
A pie de escalerillas, los trabajadores del aeropuerto aguardaban a los
jugadores. Beckham y Raúl eran los más solicitados, como sucedería en la
terminal y en el complejo hotelero. La salida del equipo estuvo
acompañada de cánticos de dos centenares de aficionados que esperaban
desde hacía tiempo su visita. Más tarde, y tras recorrer los quince
kilómetros que separan Alicante de San Juan, el gentío volvió a dar
muestras de su madridismo. Alrededor de cien personas saludaron a la
expedición en la puerta del Hotel Hesperia Alicante Golf Spa, cuartel
general antes de desplazarse al Estadio José Rico Pérez, donde
disputarán el último encuentro antes de encarar la previa europea.
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