El secretario general de la FIFA, Urs Linsi,
calificó de legítimo el deseo del seleccionador alemán Jürgen Klinsmann
de que el país anfitrión, Alemania, renuncie a jugar el partido
inaugural del Mundial de 2006 y ceda esa posibilidad a Brasil como
actual campeón del mundo. Sin embargo, Linsi recordó que Brasil primero
tiene que clasificarse para el Mundial.
Klinsmann ha levantado alguna polémica con su idea de que Alemania no
juegue el partido inaugural, en Múnich, aunque este jueves, durante la
inauguración de la primera tienda oficial del Mundial 2006 en Berlín, le
quitó relevancia al asunto y dijo que, de momento, no tenía prioridad.
La tienda del Mundial fue inaugurada con un disparo a puerta del
presidente del Comité Organizador, Franz Beckenbauer, en un acto al que
asistió también el Ministro de Interior, Otto Schily. |