El portero brasileño Nelson Dida, del Milan,
que el martes fue alcanzado en el hombro derecho por una bengala lanzada
por seguidores del Inter, declaró que pasó más miedo en un partido
contra la Roma, en mayo del año pasado. "¿Miedo? Honestamente no mucho.
Tuve más en el partido ante la Roma en mayo, pues hubo una explosión de
petardo muy cercana a mí. En realidad no pensé en protegerme, pues mi
pensamiento era el de quitar del área lo más pronto posible los objetos
que caían para que el partido pudiera seguir", ha comentado Dida.
Ese día, el 2 de mayo de 2004, en partido de la trigésimo segunda
jornada liguera disputado en el milanés estadio Giuseppe Meazza, desde
la curva ocupada por seguidores de la Roma (misma zona de la ocupada en
la noche del martes por los del Inter) cayeron petardos sobre la meta de
Dida.
En varias ocasiones el partido se tuvo que parar, ya que los petardos y
los objetos alcanzaron a los milanistas Dida (dos ocasiones, m. 82 y 87)
y Gattuso (m. 50). Ambos cayeron sobre el césped, pero tras ser
atendidos se levantaron para que el partido prosiguiera.
El Milan ganó 1-0 y conquistó matemáticamente el campeonato de Liga
2003/04, al obtener tener una distancia de 9 puntos sobre el equipo
romanista, segundo clasificado, a falta de dos jornadas para la
conclusión de la competición.
Hematoma y quemadura
Dida fue examinado este miércoles por los médicos del Milan, los cuales
no han encontrado ninguna lesión preocupante. "Antes de que me diera la
bengala ya vi que era inútil limpiar el área de objetos, pues
continuaban cayendo sobre el terreno de juego", añadió.
Dida ha indicado que durante los minutos de suspensión momentánea se dio
cuenta de que él no podía volver al terreno de juego al sufrir un dolor
"demasiado fuerte" en el hombro. "Acudí también a un hospital para que
me hicieran un control, pero al final todo ha quedado en un fuerte
hematoma y una leve quemadura. El domingo, ante el Siena, espero estar",
dijo Dida.
El meta internacional brasileño ha reconocido que tras el partido
acudieron rápidamente a interesarse por su salud los jugadores
interistas Sinisa Mihajlovic y Javier Zanetti, y después recibió la
llamada telefónica del presidente del Inter, Giacinto Facchetti.
"El sentimiento que me queda de lo vivido, como deportista, es de
disgusto. Y siento que esas imágenes hayan sido vistas en todo el mundo.
Sería mejor que quien tiene potestad para evitar cosas similares haga
algo más severo para evitar que se repitan ciertas situaciones", añade
Dida. |
