Owen, Roberto
Carlos y Ronaldo sellaron el último triunfo de la temporada en un
partido donde no había nada en juego, y en el que tanto Zaragoza como
Real Madrid pusieron picante a la despedida liguera. Pese al empate
logrado por Óscar, los jugadores de Luxemburgo siempre manejaron el
duelo con soltura, e incluso pudieron aumentar la renta goleadora. Será
el próximo 8 de julio cuando la plantilla vuelva a prepararse para
luchar nuevamente por el título liguero.
Se acababa un nuevo ejercicio futbolístico, y lo hacía en La Romareda
con dos equipos que sólo se jugaban la honra. En el Madrid, Beckham era
baja por sanción, y su lugar en el once lo ocupaba Celades, que de esta
manera ponía fin a su trayectoria vestido de blanco, en el regreso de
Helguera en detrimento de Pavón. Luxemburgo quería concluir la Liga
certificando el décimo encuentro sin perder. Mientras, el Zaragoza vivía
tranquilo en la mitad de la tabla, y sólo quedaba el objetivo de
intentar alcanzar la octava plaza. Todos querían dedicarle el triunfo al
meta recién retirado, César Lainez, que recogió el cariño de su afición
en los prolegómenos del duelo.
No había variaciones tácticas con respecto a partidos anteriores, el
Madrid esperaba ordenado a su rival, y aguardaba paciente una contra
para combinar con Owen y Ronaldo que sellaban a cinco jugadores del
cuadro de Víctor Muñoz mientras sus compañeros atacaban. Pese al dominio
local, sus acercamientos más peligrosos sólo eran provocados por jugadas
a balón parado, donde la buena colocación de Helguera, Zidane y Gravesen
desbarataba cualquier susto para Casillas. Con Míchel Salgado
disfrutando en solitario de la banda derecha, la manija del equipo
correspondía a Raúl y Zidane. El francés, más activo que en citas
precedentes, sería protagonista con posterioridad.
Tablas merecidas
Cuando superaba a la dupla formada por Cani y Movilla se encontraba con
espacios para conectar con los delanteros, y para probar fortuna, como
ya hiciera en Sevilla hace quince días. En una jugada similar, el ‘5’
chutó desde treinta metros, Luis García no acertaba a blocar el esférico,
y Owen, siempre al acecho, abría el marcador (24´). En el primer zarpazo,
el Real Madrid había acertado con la diana. El Zaragoza se resintió,
pero siguió con el plan trazado, con Galletti y Savio entrando por
bandas, y Óscar haciendo de enganche entre la media y Villa, que hasta
el momento no había aparecido. Hasta que al filo del descanso, esa
conexión encontró sus frutos y Óscar firmó una igualada (43´) que
reflejaba la igualdad vivida durante un primer tiempo que acabó sin
mayores sobresaltos para ningún área.
Entra Figo, marca Roberto Carlos
Con el abrazo entre Savio, ex madridista, y Roberto Carlos, y el cambio
de Figo por Owen, arrancaron los últimos cuarenta y cinco minutos de la
temporada. Tácticamente no hubo muchas variaciones porque el luso
entraba por la derecha y el centro indistintamente. Con mayor posesión
de balón, los madridistas pusieron mayor intensidad al duelo para
despedir el año futbolístico con victoria. Y rápidamente se volvió a
poner en ventaja (53´). Una arrancada de Roberto Carlos, vista por
Zidane, y continuada por Raúl, y culminada por el brasileño lograba el
objetivo marcado por Luxemburgo.
En la banda se cocían las próximas variaciones. Guti y Solari
incrementaban el ritmo de su calentamiento, el técnico iba a recurrir
pronto a ellos, mientras Figo estuvo a punto de firmar el tercero, pero
Luis García desbarató su ocasión. Zidane se retiraba entre la ovación de
La Romareda, reemplazado por el argentino, mientras que el ‘14’
sustituiría al chico para todo, Raúl, también reconocido por la afición
local. Ahora sí que el dibujo había cambiado. Ronaldo se echaba a la
derecha, Solari entraba por la izquierda, y Guti y Figo buscaban la
sentencia con continuas internadas y búsqueda de espacios. En el
Zaragoza, sólo Savio y Cani se revelaban ante una derrota que tenía
pinta de ampliarse. Si Luis García había fallado en el primer gol
visitante, su actuación empezaba a ser decisiva para no encajar más
tantos.
Víctor Muñoz mandaba a sus hombres al ataque, aún a riesgo de dejar
desguarnecida la defensa. Primero con Camacho, y posteriormente con
Cuartero y Piti. Pero el tiempo se agotaba y todo hacía presagiar que la
victoria caería del lado visitante, que manejaba con sabiduría los
minutos finales. Octavo triunfo en las últimas diez jornadas que sirve
para despedir con buen sabor de boca la temporada. El ejercicio 2005-06
tendrá su punto de partida el 8 de julio. |