El delantero brasileño pasó en la
noche del lunes por los micrófonos de ‘El Larguero’ de la Cadena SER,
donde aclaró el origen de la tan comentada ‘cucaracha’ con la que
celebró sus dos goles ante el Alavés. Además repasó las últimas
polémicas arbitrales en las que se ha visto inmerso el equipo: “Desde
hace dos o tres años, si hay duda nos pitan en contra”. Una profunda
entrevista en la que Ronaldo habló de mucho más que fútbol.
La que ha liado con la cucaracha.
Antes de nada quería decir que era una tontería entre amigos y que en
ningún momento, y de ninguna manera, quería ofender o insultar a la
afición contraria. Jamás lo he hecho y jamás lo haré. Pero se sintió
ofendido el presidente-entrenador-preparador físico…
Por las declaraciones de Piterman, ¡Menos mal que no es usted jugador
del Alavés!
Es su opinión, yo no veo tan grave lo que he hecho. Yo sólo lo celebré,
yo me dedico a lo mío, que es jugar, marcar goles y celebrarlos. A él le
sentó mal, pero tampoco es la persona idónea para juzgar a otros. Sobre
todo llamarnos payasos a mí, a Roberto y a Robinho. Un hombre que salió
desnudo en una revista, que salió como fotógrafo, como presidente, como
entrenador… No creo que haya sido nada grave. Cuando marqué el otro día
en el Bernabéu hice un baile que era muy divertido y no ofendí a nadie y
no se comentó nada tampoco. Lo que pasa es que el Alavés va muy mal y el
hombre salió ahí a defenderse.
¿De dónde salió la idea?
Salió de dos amigos que me dijeron que no me atrevería a hacer la
cucaracha para celebrar un gol. Les dije que lo haría y les pedí algo a
cambio: ellos tienen que ir conmigo a cenar a un restaurante vestidos de
mujeres. Yo he cumplido, así que ahora lo tienen que hacer.
Juan José Millás (El País) le hizo un reportaje con motivo de un
viaje a Israel y Palestina como Embajador de Buena Voluntad de la ONU.
Se descubre a un Ronaldo a quien le preocupan los conflictos del mundo,
las injusticias, la pobreza…
Esos viajes los hago una vez al año, pero me gustaría hacerlo más veces.
Es algo que me llena, me satisface, estoy muy orgulloso de ser Embajador,
pero no tengo mucho tiempo para hacerlo, y pocas veces tengo un día
entero para hacer un viaje así y para organizarlo. Aquel día salimos a
las 7 de la mañana y volvimos a las 4 o a las 5 de la madrugada a Madrid,
y a las 10 tenía que estar en Las Rozas. Pero estoy encantado y cada año
quiero seguir haciéndolo.
Una vez que ha visto a los de un lado y a los del otro, ¿se ha
llegado a enterar de cuál es el problema de Israel y Palestina?
Normalmente sigo la información del mundo y me pareció que las cosas
iban camino de arreglarse. Desgraciadamente volvieron algunos ataques,
pero en aquella ocasión estaba la situación bastante tranquila. Hacía
tres o cuatro meses que no había ningún atentado y parecía que podía
arreglarse.
Entonces la ONU le dice: “Ronaldo, vaya para allá y deles una alegría”.
¿Qué le cuenta a su hijo cuando le pregunta qué está pasando allí?
Mi hijo todavía es muy pequeñito y no se entera mucho de eso. Ya se le
contaré. Pero mi viaje es sobre todo para los niños. Me acuerdo cuando
fui a Kosovo. El viaje también fue increíble. Estuve un día entero y fui
prácticamente para arreglar la calefacción de una escuela que había sido
destrozada por la guerra. No tenían escuela porque la calefacción no
funcionaba y hacía mucho frío. Doné dinero para arreglar la calefacción
y 300 ó 400 niños pudieron volver a estudiar.
¿Uno llega a cansarse o agobiarse de que le llamen de todas
partes para pedir?
No, tampoco puedo ayudar a todo el mundo, pero puedo mandar muchos
mensajes positivos. Hay mucha gente que quiere ayudar en el mundo y que
no sabe muy bien cómo hacerlo. Es cierto que también hay muchas
instituciones de las que te puedes fiar bien poco. Lo que intento es
hacer cosas buenas y demostrar que la ONU tiene programas serios de los
que se pueden fiar y con los que la gente puede ayudar.
¿Le asustó el hacer un viaje a Israel y Palestina en un mismo día?
Hombre, tenía todas las garantías de la ONU de que todo iba a ser
tranquilo y que toda la seguridad estaba montada para mí. No tengo nada
que ver ni con Israel ni con Palestina. Fui bastante tranquilo, fue algo
muy bonito porque tanto en un lado como en el otro me trataron como un
ídolo.
¿Quién cree que tiene razón?
Yo estoy a favor de que cada uno tenga su sitio, su tierra. Pero esto es
desde hace mucho tiempo.
En ese reportaje habla también de su lesión en el Inter.
Estaba desesperado porque sabía que estaba roto. La rotura me llegó
hasta la pierna, y sabía que lo pasaría muy mal después. Después de ocho
meses recuperándome la rodilla doblaba 30 ó 40 grados. Para poder jugar
era necesario 90 ó100. En Estados Unidos me dijeron que si quería volver
a jugar tenía que operarme otra vez, pero me dio miedo y no quise. En
Francia, el doctor que me había operado me dijo que no era necesario.
También le dijo que nunca volvería a recuperar el cien por cien pero
que podría volver a jugar al fútbol.
Sí. Hoy mi pierna derecha dobla menos que la izquierda, pero no me hace
falta más. Fue muy bonito cuando volví a jugar porque me aclamaron todos
los estadios. Lo estuve comentando el otro día con Woodgate, que volvió
a jugar después de un año.
¿Cómo vio a Woodgate?
Le vi muy bien, estaba preocupado, triste porque le habían expulsado y
por el autogol. Le dije que no pasaba nada, que no tenía que preocuparse
de esto. Lo más importante era que la pierna estaba bien, que había
vuelto a jugar.
¿Le inspira confianza, le parece tan bueno como dicen algunos?
La verdad es que no le había visto jugar nunca, pero le veo muy bien en
los entrenamientos. Va muy bien de cabeza, es un líder dentro del campo,
grita muchísimo, coloca bien la defensa. Va a ser un jugador muy
importante para el Madrid.
El Ronaldo del Inter no se parece al Ronaldo del Barcelona, y el
Ronaldo del Madrid no se parece al del Inter. ¿Ha tenido que cambiar su
forma de jugar?
Sí, con los años gano experiencia y corro menos. Pero siempre me
gustó jugar así, como juego en el Madrid. Antes corría más, tenía más
funciones, pero siempre como jugador he decidido ser un jugador de área,
un matador.
¿Es más feliz ahora jugando que antes?
Yo soy siempre feliz cuando juego al fútbol.
Y de la polémica de los extremos, del cuadrado mágico… ¿qué piensa?
Las posiciones en el campo dependen del movimiento del equipo. No
hay un esquema táctico que cambie el movimiento de un jugador. Por
ejemplo puedo estar de delantero como puedo estar por la izquierda, que
me gusta también, y cuando estoy en la banda soy un jugador de banda que
va al fondo y centro para que otro remate. No hace falta que sea un
jugador fijo, ahí, en la banda, sino que voy y centro como hacía Figo.
No hay que ser un jugador fijo hoy en día, pocos equipos juegan con
jugadores de banda.
¿Y de la otra polémica, la de los errores arbitrales?
Creo que el asunto de la impugnación del encuentro ante el Espanyol no
era oportuno. Pero desde hace dos o tres años, siempre que hay duda nos
pitan en contra. He estado en el Barcelona y en el Real Madrid y el
trato arbitral es el mismo. Últimamente nos tratan un poco peor, pero
los colegiados son humanos y es normal que fallen. |