Prosigue Brasil su plácido caminar hacia la
sexta Copa del Mundo. Para qué engañarnos. Ese parece el destino más
capaz de la 'canarinha'. Recuerda al equipo de Corea del Sur-Japón de
hace cuatro años. No enamora, pero tiene contragolpe y pegada para
resolver cuándo y cómo quiera un partido. Y ante quien sea. Bueno, eso
aún queda un poco pendiente de ver. Es la única incertidumbre.
El debate puede centrarse ahora en sus dos figuras indiscutibles,
Ronaldo y Ronaldinho. Los suyos parecen papeles cambiados en la fase
final mundialista de Alemania.
El madridista, conforme a lo esperado por la lógica aplastante de que el
balompié recompensa a los buenos futbolistas, ya ha superado el registro
goleador de 'Torpedo' Müller. Dos teorías al respecto y comparando su
rendimiento de esta temporada: 1) Se ha reservado para algo que es
sagrado en un brasileño, la 'seleçao'. 2) Cuando está rodeado de 'buenos',
marca con más facilidad. Conclusión: Es el mejor 9 desde finales de los
90 y aún tiene tela que cortar. Debe ser el mejor fichaje del Madrid
2006/07, kilo más o menos. El juego del fútbol es un estado de ánimo la
mayoría de las veces.
El barcelonista, según la lógica de su descomunal temporada en Europa,
es, por contra, un ausente, una especie de fantasma, alejado del 'o jogo
bonito' que ha reinventado y que está como pasado de forma. Dos
probabilidades: 1) Ha llegado reventado tras ganar Liga y Champions y
anotar goles para aburrir, tanto como anuncios ha grabado. 2) Cuando
está rodeado de 'muy buenos', destaca menos. Conclusión: Es el mejor 10
del mundo desde hace tres años y el futuro es suyo. Debe ser, igualmente,
la mejor baza azulgrana 2006/07. Otra cosa es que en esta Copa del Mundo
aún sorprenda con un imposible. Seguro que algo tiene reservado. |